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miércoles, 16 de diciembre de 2009

Banca Móvil para el Desarrollo Rural

Los beneficios de la banca móvil poco a poco se van posicionando en nuestros países. En las grandes áreas urbanas los clientes de los bancos fácilmente hacen consultas, pagos y transferencias mediante este dispositivo, sin necesidad de instalar un software especial en el celular. Lo hacen mediante mensajes de texto llamados SMS. Es cuestión de tiempo y de confianza por parte de los clientes. Una modalidad sencillas es inscribir el número de teléfono celular en el sitio web del banco en donde tenemos la cuenta de ahorros o la cuenta corriente. Registramos, además, las cuentas que hay que queremos pagar, la de luz, la del agua, por ejemplo. Como un mecanismo de seguridad le ponemos un alias a esa cuenta, por ejemplo “Chove”. En lo sucesivo le enviamos al 1234, que es el número de nuestro banco, un mensaje del tipo ” P luz chove” (pague la luz debitando de mi cuenta). Luego de ello, el banco nos envía un mensaje confirmando el pago con un número de transacción.

Con este mecanismo simplemente me relaciono con el banco. Accedo a instrumentos y servicios financieros con el celular como canal. Así conocemos la banca móvil en nuestros países, en las ciudades. Pero es más que eso. Una banca móvil más avanzada nos facilita transacciones entre clientes del banco. Es decir nos permite pagar y recibir pagos mediante el móvil. La transacción la hacemos de manera segura mediante el ingreso de claves y si hay alguna duda tenemos un número de transacción. En el fondo tengo mi celular funciona como billetera electrónica.

Esto no tiene nada de espectacular en este mundo que sorprende con tantas innovaciones. Pero puede ser interesante exponer las posibilidades de la banca móvil en el área rural particularmente para aquellas personas que normalmente están excluidas del circuito financiero como consecuencia de sus altos costos, de sus requisitos o porque simplemente están lejos de los bancos y moverse a la agencia puede ser costoso.

En efecto, hay la convicción desde diversos ámbitos que una manera de cerrar las brechas sociales en América Latina es facilitando el acceso del campesino a los servicios bancarios mediante el uso de la telefonía móvil. Según el BID el 70 por ciento de la población en América Latina carece de una cuenta bancaria, lo que les margina de los beneficios de la economía formal, como el crédito. En contraste el 66 por ciento de la población posee un teléfono celular. En Ecuador ese porcentaje puede llegar incluso al 80%. No es difícil encontrar campesinos que carecen de unos buenos zapatos, pero no de teléfono celular. De hecho para la mayoría es necesario un celular para coordinar faenas diarias y lo usan de manera inteligente y eficiente, saben que es costoso mantener el celular por lo cual acuden a los mensajes de texto (SMS) y al uso de los tonos para comunicarse con sus amigos. Por otro lado, muchos de estos campesinos están lejos de auténticos servicios e instrumentos financieros, pues para ellos las cosas no van más allá de poseer una modesta cuenta de ahorros en la cooperativa de su localidad, cuando no prefieren conservar sus ahorros en la casa, lejos de la tiranía del único banco que tiene el pueblo.

En el área rural se pueden crear auténticos bancos virtuales.Los titulares de las cuentas con puros mensajes de texto SMS podemos pagar los productos que compramos en el mercado, transferir dinero a nuestros amigos y familia o cargar crédito a nuestro propio móvil. El patrono podría depositarnos el sueldo en nuestra cuenta móvil. Y he aqui un servicio clave: podemos recibir remesas desde el exterior directamente en nuestro movil, sin necesidad de trasladarnos a una ciudad para recibirla. Más allá el gobierno podría transferir directamente los subsidios que otorga a los más pobres. En caso de necesitar el efectivo, podríamos acudir a un tendero autorizado y solicitarlo. Del mismo modo podemos acudir a ese mismo tendero y entregarle mi efectivo, de modo que incremente el saldo en nuestra cuenta virtual. Es decir estariamos depositando en nuestra cuenta movil. Podemos verificar el saldo y garantizar la seguridad de todas las transacciones mediante claves sencillas. Todo con un costo infinitamente pequeño por transacción.

En Ecuador, la cooperativa Jardin Azuay, que funciona en el sur de país es pionera en banca movil rural. Hace mas de 2 años sus socios pueden hacer transferencias entre cuentas de la cooperativa. En un mensaje de texto un socio digita: “TRANSF CA 12345 654321 100”, donde el primero es el código de la transacción, el segundo el tipo de cuenta, el tercero la cuenta de origen, el cuarto la cuenta de destino y el ultimo la cantidad a transferir. Al socio dueño de la cuenta de origen le llegara un mensaje en donde responde “SI” para aceptar la transferencia o “No” para rechazar. Todos los socios pueden hace consulta de sus saldos de su cuenta y consulta de pagos de sus creditos. En todos los casos el numero celular del socio se debe registrar previamente y enviar los mensaje a un número de 4 digitos. En la actualidad, la Cooperativa, esta trabajando en la implementacion de puntos POS, es decir puntos con tenderos, lo cual multiplica la presencia de Jardin Azuayo. A estos POS la gente puede acceder a efectivo o entregar efectivo, con total seguridad y sin acudir a una agencia a Paute o a Cuenca.

Estas son algunas modalidades de uso del celular que se están extendiendo en el mundo. En Africa (ver www.safari.com) India han avanzado bastante y las personas acceden a crédito barato y sin burocracia. Hasta hace tiempo, las cosas eran más complejas debido que parecía que era otro negocio de las operadoras de telefonía celular aliadas con los grandes bancos, pues en algunas modalidades es necesario tener una tarjeta SIM (el chip) adecuada proporcionada por la operadora y en esas circunstancias no había mucha esperanza si se pasaba de la tiranía de los bancos a la tiranía de las operadoras celulares. Afortunadamente se están haciendo desarrollos que a punta de software permiten banca móvil sin el concurso de las operadoras (ver www.mi-pay.com).

Lo que es claro es una pequeña cooperativa puede ofrecer sus servicios en el área rural y no necesita invertir en infraestructura para llegar a más gente con sus servicios. Además los costos financieros de los servicios pueden ser menores. El dueño de un granero, de una tienda, de una farmacia en un pueblo, puede ser un punto de servicios financieros POS (point of Sale) y el celular su herramienta de trabajo. Llegará el momento en que las personas confien más en su celular que en su banco. Hay muchas promesas con la tecnología que invitan a la creatividad y la innovación en el campo de las microfinanzas en Ecuador y América Latina. Esperamos que los vaticinios de los expertos se cumplan y la multifuncionalidad extendida del celular contribuya a la reducción de la pobreza y al cierre de las brechas sociales en nuestros países.